martes, 12 de junio de 2018

LEGIONES ROMANAS, FORMACIÓN EN CUNEUS




La “Caput Porci” formación en cabeza de cerdo o formación en Cuneus era la formación característica de las Legiones Romanas a la hora de ejecutar una maniobra ofensiva contra un enemigo en campo abierto durante la época bajo imperial. Se cree que esta forma táctica de disponer los efectivos de la legión en el campo de batalla tiene su origen en los primeros encuentros con los Germanos y fue posteriormente especializándose y adaptando a la forma de lucha de la Legión.

Esta formación consistía en un cuadro denso y compacto en el que cuando la columna de ataque tomara contacto con el grueso del enemigo y debido al empuje de los soldados de la retaguardia de la formación, esta se iría deformando hasta convertirse en una especie de cuña donde toda la fuerza se concentra en un solo punto, el centro, para romper la formación enemiga y abrir un hueco en el frente del adversario, esta formación era apoyada por la caballería y auxiliares en los flancos para evitar ser envueltos desde las alas del contrario. La formación en cuneus se caracteriza por ser una columna profunda, cerrada y plegada a diferencia del Orden de Batalla en triplex acies y en quincux que ordinariamente se caracterizan por ser una formaciones delgadas, extensas, y desplegadas.
            

Está claro que este tipo de formación es una táctica de choque que nos ofrece una columna compacta y densa que facilita la movilidad y una mayor fuerza de penetración para abrir un hueco en el frente enemigo y así romper toda su formación pudiendo de esta manera comenzar el combate cuerpo a cuerpo tras los escudos y a la orden “contendite vestra sponte”  ("Enfrentaos a vuestro rival"), los legionarios asumían tras la rotura de las líneas una disposición agresiva y atacaban a cualquier rival que se les opusiera en la forma característica de la Legión Romana, pinchando con el gladio.







Las tácticas del ejército Romano apenas variaron durante toda la época imperial y solamente en algunas ocasiones cuando hubo que luchar contra los bárbaros, se recurrió de nuevo a la antigua falange, pero es a partir de las reformas de Diocleciano y Constantino cuando se adoptó esta formación aprendida de los germanos, el cuneus, formación de “cuña truncada” en forma de trapecio con el menor de los lados paralelos frente al enemigo la hacía ideal como formación ofensiva en los ataques, su debilidad estribaba en que si no se rompían las filas enemigas en los primeros momentos estos podían flanquear a la legión y envolverlos creando una bolsa que los aniquilaría.










La táctica de formación en cuneus tuvo su primer origen en las primeras guerras contra los germanos que atacaban en bloque compacto con sus grandes hachas.